lunes, 27 de julio de 2009

ASÌ SOÑÈ


Me tomó de la mano,
Su dulce palma rozó la mía,
La ternura jamás sentida se hacía cada momento
una sensación inexplicable-
Caminamos por las amplias avenidas de
La antigua Valladolid, plena de árboles que nos flanqueaban.
En un momento, sin esperarlo me dijo
muy cerca de mi cara: “Pepe” entramos a nuestra dimensión, que por años buscaste, este momento es único en tu vida,
así que disfruta de todo lo que tus sentidos te complazcan”

Recuerdo que nos sentamos en una banca con figuras de hierro forjado, fundido, y un estilo clásico, ahí mis músculos se relajaron, las palmas de sus manos viajaron por mi cuello, rostro, viceversa, los labios de ella se fusionaron en cada parte de mis extremidades, yo solo cerré los ojos por decisión de ella, porque sabia que el color de sus ojos miel los veía con mi alma, porque la sensación de su piel era algo que yo descubrí en los intrépidos sueños,
porque mi sueño quedó en los anales de la memoria de este hombre que escribe aún en su perpetuo sueño.

2 comentarios:

  1. Que bonitos recuerdos...


    aún sigue en tu corazón?...

    nunca saldrá?... porque tu no quieres?...


    Un abrazo.

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  2. No, nunca la olvidarè, porque fue el acontecimiento màs grande de mi existencia.
    Ella existe y por ello existe armonìa en la vida de un hombre... Quizàs yo.

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