lunes, 15 de febrero de 2010

Un Poema de Pablo Neruda

DÉJAME sueltas las manos
y el corazón, déjame libre!
Deja que mis dedos corran
por los caminos de tu cuerpo.
La pasión —sangre, fuego, besos—
me incendia a llamaradas trémulas.
Ay, tú no sabes lo que es esto!

Es la tempestad de mis sentidos
doblegando la selva sensible de mis nervios.
Es la carne que grita con sus ardientes lenguas!
Es el incendio!
Y estás aquí, mujer, como un madero intacto
ahora que vuela toda mi vida hecha cenizas
hacia tu cuerpo lleno, como la noche, de astros!

Déjame libre las manos
y el corazón, déjame libre!
Yo sólo te deseo, yo sólo te deseo!
No es amor, es deseo que se agosta y se extingue,
es precipitación de furias,
acercamiento de lo imposible,
pero estás tú,
estás para dármelo todo,
y a darme lo que tienes a la tierra viniste—
como yo para contenerte,
y desearte,
y recibirte!




Poemas de Pablo Neruda

Me encanta Pablo Neruda, y lo leo.

3 comentarios:

  1. Este poema particularmente me gustó mucho.
    Y mira que Pablo Neruda no me gusta.



    Saludos.

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  2. ¡Esto es precioso!, verdaderamente sensual y apasionado... me identifico, me hace sentir... Gracias amigo querido, por compartirlo.

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